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EDITORIAL
Diez consideraciones en torno a la franquicia
1. El sistema de franquicias ha demostrado su eficacia para, por un lado, el crecimiento de conceptos de negocio bien estructurados y de éxito comprobado; y, por otro, para la creación de unas numerosísimas redes de franquiciados que aportan proximidad, dedicación, creación de empleo y generación de riqueza económica. 2. La franquicia española cuenta con todos los ingredientes para seguir facilitando la expansión de las empresas, superando visiones cortoplacistas, gestiones oportunistas y aportando un fondo de equilibrio ético en las relaciones entre franquiciador y franquiciado y entre estos y el mercado. 3. En la franquicia hay incidencias, como las hay en todos los órdenes de la vida; cuando se producen hay que analizar si las causas son propias o ajenas a la franquicia. La experiencia nos dice que en muchas ocasiones son ajenas. Conseguir fijar las cosas en su justo punto es trabajo de todos. 4. Tan importante es que el franquiciador desarrolle bien su negocio y su red de franquiciados como que estos sean consecuentes con sus compromisos contractuales. Cuando las cosas no salen como esperamos, no hay que equivocarse de enemigo. 5. El mercado de la consultoría de franquicias es demasiado pequeño para los operadores que hay en el mismo. Se está produciendo una cierta selección natural, pero los esfuerzos realizados hasta ahora para que se aplique una forma de trabajo adecuada no han dado —salvo excepciones— con la solución. 6. No todo es franquiciable. 7. No todo el mundo puede ser franquiciado. 8. El crecimiento internacional de la franquicia española es imparable. También en los tiempos del Brexit la franquicia no tiene fronteras. El franquiciador (nos lo han demostrado muchas marcas) debe ver el mercado en su globalidad. 9. La financiación de los franquiciados requiere de bancos que sepan ver las ventajas de negociar a tres bandas (franquiciado, franquiciador y entidad financiera), reduciendo el riesgo de sus decisiones. No todos se han enterado aún. 10. Una asociación aporta valor, servicios, contactos, protección, desarrollo, información siempre y cuando sus asociados lo quieran. Los 200 socios de la AEF siguen demostrando que unidos, siendo exigentes y a la vez buenos colaboradores, la franquicia, en y desde España, es y será mejor cada día.
Xavier Vallhonrat
Presidente de la AEF
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LIBRO OFICIAL DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE FRANQUICIADORES 2017